jueves, 21 de febrero de 2013

La dieta Mediterránea: qué es y sus beneficios.


Las primeras referencias científicas a una dieta mediterránea son del año 1948, cuando Leland G. Allbaugh estudió el modo de vida de los habitantes de la isla de Creta y, entre otros aspectos, comparó su alimentación con la de Grecia y EE UU. 

Paises dieta mediterránea
Por su parte, el fisiólogo norteamericano Ancel Keys, que encabezó un estudio sobre las enfermedades coronarias, el colesterol de la sangre y el estilo de vida de siete países (Italia, Yugoslavia, Grecia, Holanda, Finlandia, EE UU y Japón) tras la Segunda Guerra Mundial, contribuyó a su difusión. 
Keys y sus colaboradores apreciaron que la incidencia de las enfermedades coronarias era menor en las zonas rurales del sur de Europa y en Japón. 


Dieta Mediterránea cardiosaludable
Sospecharon que había un factor protector en el estilo de vida, que etiquetaron como "manera mediterránea". 
Describieron este estilo de vida como "muy activo físicamente (por la escasa mecanización del agro), frugal, y con una ingestión predominante de productos vegetales y reducida en productos de origen animal". 

La posterior difusión de sus resultados asimiló el concepto de "estilo mediterráneo" con el de "dieta mediterránea".




Históricamente España como país situado en la cuenca del mediterráneo ha presentado una alimentación sana y equilibrada basada en patrones dietéticos propios de los países mediterráneos y que se recogen en lo que conocemos como dieta mediterránea 

La Dieta Mediterránea se caracteriza por la abundancia de alimentos vegetales, como pan, pasta, arroz, verduras, hortalizas, legumbres, frutas y frutos secos; el empleo de aceite de oliva como fuente principal de grasa; un consumo moderado de pescado, marisco, aves de corral, productos lácteos (yogur, quesos) y huevos; el consumo de pequeñas cantidades de carnes rojas y aportes diarios de vino consumido generalmente durante las comidas. 
Caracterísiticas dieta mediterránea
Su importancia en la salud del individuo no se limita al hecho de que sea una dieta equilibrada, variada y con un aporte de macronutrientes adecuado. A los beneficios de su bajo contenido en ácidos grasos saturados y alto en monoinsaturados, así como en carbohidratos complejos y fibra, hay que añadir los derivados de su riqueza en sustancias antioxidantes. 


El 26 de Noviembre de 2010 el comité intergubernamental de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) declaro la Dieta Mediterránea como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad reconociendo su papel fundamental a la hora de llevar un estilo de vida saludable. 

Obesidad abandono dieta mediterránea
Pese a que la dieta mediterránea es la base de nuestra alimentación se ha producido distanciamiento de la dieta mediterránea y la adquisición de hábitos menos saludables caracterizados por la ingesta de alimentos de alto valor energético, ricos en azúcares simples y grasas cuya composición de ácidos grasos difiere mucho del aceite de oliva, que aportaba beneficios para la salud dando lugar a efectos negativos en la salud de la población española aumentando la incidencia de enfermedades no transmisibles crónicas como obesidad, diabetes, hipertensión arterial, hipercolesterolemia que son claros factores de riesgo cardiovascular, dando lugar con el paso del tiempo a una reducción de la esperanza y calidad de vida


Por ello debemos basar nuestra alimentación en la dieta mediterránea ya que esta se basa en una alimentación equilibrada que nos aportara beneficios para nuestra salud.




AUTORA Victoria Grande Cerrato: 


Diplomada en Nutrición Humana y Dietética.
Máster en Obesidad, Ejercicio Físico y Salud.




REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:


http://predimed.onmedic.net/
http://es.wikipedia.org
http://dietamediterranea.com/